Rutinas de cuidado de la piel para todos los tonos
El deseo de tener un tono de piel claro y uniforme, libre de los signos del envejecimiento, sigue siendo casi universal. Una de las diferencias entre los tipos de piel radica en la respuesta a la luz ultravioleta (UV).
La clasificación de los tipos de piel describe desde el tipo 1, piel blanca y pálida que siempre se quema y nunca se broncea; hasta el tipo 6 que es piel de color marrón intenso a negro que nunca se quema.
Cuidado de la piel para todos
Sin embargo, existe una gama fundamental de crema hidratante, así como otros productos que pueden mantener una piel sana en todos los tipos, algunos de los cuales se mencionan a continuación:
Limpiador
La limpieza es el paso más importante para eliminar la suciedad, el sudor y la grasa de la piel. Un buen limpiador es la clave para mantener la salud de la piel, ya que proporciona una limpieza óptima de la piel a la vez que minimiza el daño a la barrera cutánea.
Los limpiadores contienen al menos un tensioactivo, que elimina tanto las impurezas de base acuosa como las de base oleosa. Los limpiadores sin agentes exfoliantes, con un pH neutro (7,0) o ligeramente ácido, suelen ser los más compatibles.
Hidratantes
Las cremas hidratantes son la clave para mantener la hidratación de la piel evitando la pérdida de agua. Los humectantes pueden clasificarse en sus diferentes tipos.
Las cremas hidratantes y humectantes atraen las moléculas de agua hacia la propia piel. Suelen tener una textura fina, se absorben con relativa rapidez y son ligeros. Suelen ser mejores para las pieles con tendencia a la grasa, pero funcionan bien para la mayoría de los tipos de piel.
Las cremas hidratantes y humectantes emolientes son cremas más ricas que mejoran la función de barrera de la piel mediante la reposición de lípidos. Las cremas hidratantes oclusivas son las que hidratan más profundamente y proporcionan una barrera física a la piel. Son de textura espesa y se utilizan para pieles muy secas o incluso inflamadas.
Las cremas hidratantes deben utilizarse con precaución, ya que su uso excesivo puede contribuir al aspecto apagado de la piel, así como al acné y la rosácea. Evita las que tienen fragancias fuertes y opte por las no comedogénicas, que son lo suficientemente suaves para el uso diario.
Protección solar
El consejo más importante es utilizar un protector solar de amplio espectro, que actúe tanto contra los rayos UVA como contra los UVB.
Esto es muy recomendable en la rutina diaria de todos los tipos de piel. Existe el malentendido de que los tonos de piel más oscuros (tipos 5-6) no necesitan protección solar porque se queman con poca frecuencia.
Sin embargo, la protección solar es esencial para prevenir los daños en el ADN inducidos por los rayos UV que causan hiperpigmentación, fotoenvejecimiento y enfermedades de piel.
Los protectores solares pueden dividirse en dos tipos: físicos y químicos.
Los protectores solares físicos o inorgánicos contienen minerales que reflejan la luz UV del sol; los más utilizados son el óxido de zinc y el dióxido de titanio. Suelen ser los mejores para las pieles propensas a las alergias, pero pueden provocar un brillo excesivo y un tono blanquecino en la piel. Sin embargo, los nuevos protectores solares físicos microionizados tienen un tinte mínimo y son más adecuados para la piel de color.
Los protectores solares químicos u orgánicos absorben la luz UV y cambian su estructura molecular. Los ingredientes activos pueden variar entre los protectores solares, y es menos probable que dejen un residuo de color. Sin embargo, pueden ser mucho menos tolerados en pieles sensibles y pueden degradarse tras absorber demasiada luz solar.
En realidad, la mayoría de los protectores solares combinan propiedades físicas y químicas. Para obtener la máxima protección, utilice un protector solar de amplio espectro con un FPS de 30 o superior, aplicándolo cada dos horas.
Retinoides
Los retinoides son derivados de la vitamina A con beneficios para el cuidado de la piel fuertemente respaldados por la investigación. La vitamina A es una vitamina liposoluble y desempeña un papel fundamental en el crecimiento y el desarrollo de las células, lo que la convierte en un producto clave para combatir el envejecimiento, el acné y la hiperpigmentación.
En su forma activa, los retinoides actúan sobre la piel para desprender las células moteadas y pigmentadas y dejar al descubierto una piel más clara y fresca. Es mejor introducirlos en un régimen de cuidado de la piel lentamente, ya que la irritación y la sequedad iniciales son efectos secundarios comunes. Los retinoides son un producto que sólo se utiliza por la noche y deben ir acompañados de una protección solar durante el día.
Vitamina C
La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, es el antioxidante más abundante en la piel. Tiene propiedades antiinflamatorias, apoya a otros antioxidantes y ayuda a estimular la producción de colágeno.
El uso de la vitamina C en su régimen de cuidado de la piel ayuda a minimizar la apariencia de la piel foto-dañada, reduciendo la hiperpigmentación y los signos de envejecimiento.
La clave está en la forma de vitamina C aplicada, su estabilización y almacenamiento. Es posible que la veas almacenada en un envase oscuro, ya que se oxida cuando se expone a la luz o al aire, desactivando sus propiedades para el cuidado de la piel.